El desorden en mi vida era enorme. Siempre hice las cosas a mi manera y busqué por todos los medios sanar mi vida con Reiki, Constelaciones Familiares, Meditación, Gotas de Bach, Chamanismo, Gemoterapia, Registros Alashikos, Memoria Celular, Magia de las velas y cualquier técnica de sanación que me ofrecían. Pero estaba cada vez peor. TODO me llevó a quedarme sola con dos hijos de padres diferentes, sin trabajo, no tenía para darle a mis hijos un Hogar. Ya no podía seguir con mi carrera. El papá de mi beba nos había estafado y abandonado. Estaba desesperada. Fue ahí cuando llegué al Grupo Al Tercer Día. Empecé a orar, ayunar, a hacer ofrendas y a servir al Señor en el Ministerio de Música. En pocos meses yo ya tenía trabajo y estaba preparando mi boda. El Señor me bendijo grandemente con un Esposo fiel y un gran padre. Un hombre santo. Tenemos nuestra casa que la hemos reformado a nueva, estamos construyendo. Tenemos otro bebé de 1 año. Y tenemos en marcha una Empresa Familiar que sabemos va a dar muchos frutos para sembrarlo en el Reino de Dios.
Toda la Gloria al Rey de Reyes.
Melina